“Escribiendo con el hígado por causa de la
mugre”
Agradezco
la insolente y brusca levantada a las 3 de la mañana para juntar agua, gracias
a eso –y a los gritos– pude despertar y darme cuenta que en Cajamarca andamos de
mal en peor.
No tenemos
agua, nos llega por horas, las horas no son adecuadas para recepcionar agua. ¿De
una a tres o cuatro de la mañana?, para eso no se paga recibos por encima del estándar
nacional de pago por consumo. Tampoco para que se nos brinde el servicio en cisternas,
tampoco para entenderlos –como hacen ver en sus comunicados─, pagamos por un
buen servicio y su deber es brindar ese servicio.
La prestación
de servicios que nos brinda Sedacaj es pésima en los hogares, y aún más pésima
si observamos las imágenes tomadas ayer en las instalaciones de este centro de
tratamiento, el único en nuestra ciudad, dónde se nota que en ellas el agua es una porquería; de razón que el incremento de cloro, si bien no
elimina metales, obedece a la alta cantidad de polvo, eses y basura que abundan
alrededor de su infraestructura y más cercanas aún, a sus pozas.
De esa agua
bebemos, esa es el agua que llega a nuestra casa como leche, esa agua es la que
tomamos, con ella cocinamos, nos aseamos, lavamos y regamos, ¡esa agua nos va a
matar!, ya que, el cloro, como lo dice
en su informe del 2010 la OMS, es causante de cáncer estomacal.
No siempre
sucede que Sedacaj incrementa el cloro, muchas de ellas dejan pasar el agua tal
y como ven en las imágenes, de ello hay registros, hay denuncias, en algunas
periodísticas, en otras legales, pero se ha hecho caso omiso a este delito.
Si aceptáramos
la premisa mundial, cáncer por CL, diríamos,
y con total seguridad, que estamos pagando por nuestro posterior fenecimiento.
El agua es
un tesoro, no permitamos que continúen pisoteando nuestros derechos.
Merecemos respeto,
merecemos agua de calidad, para eso se paga, para eso están los trabajadores de
esta empresa ligada a la minería, la cual esta desprestigiada, y como saben
ustedes, “le llega al pincho” si los cajamarquinos nos morimos.
Las cosas
como son Cajamarca.